Con una inversión cercana a los 40 millones de pesos durante el año presupuestario 2025, el Hospital de San Vicente ha impulsado un ambicioso plan de mejoras en su infraestructura, orientado tanto al bienestar de sus pacientes como al de su personal.
Así lo informó el Subdirector Administrativo del establecimiento, Aníbal Donoso Martin, quien destacó que se ha trabajado intensamente en una matriz de desarrollo que busca renovar y optimizar espacios clave del recinto hospitalario.
“Con el retorno del director, Aldo Diez de Medina, se han abordado varios puntos críticos. Hemos trabajado en la pintura general, remodelación de puertas y la instalación de líneas guía para orientar a los usuarios hacia box clínicos, maternidad, pabellón, rayos, entre otros servicios”, señaló Donoso.
Entre las intervenciones más relevantes, se encuentra la mejora de la sala de atención cerrada y hospitalización, donde se incorporaron sistemas de control térmico como ventilación por extractores, además de mallas y cortinas retráctiles que permiten mayor confort y seguridad. También se realizaron mejoras en las residencias para funcionarios, especialmente en áreas de atención cerrada y urgencias.
El subdirector explicó que “tenemos dos tipos de usuarios: el usuario externo, que es nuestro paciente, y el usuario interno, que es nuestro funcionario. Si nuestro equipo está bien, puede entregar un mejor servicio a la comunidad. Esta simbiosis se traduce en beneficios directos para todos: un hospital más bonito, más limpio, con mejores condiciones térmicas, menor exposición a ruidos o al viento, sobre todo en zonas como pabellón”.
Estas mejoras no solo apuntan a responder a necesidades urgentes, sino también a construir una cultura de cuidado integral, en la que cada avance en infraestructura representa también un paso hacia una atención más digna y de mayor calidad.
