La jornada de capacitación contó con la asistencia de 26 funcionarias pertenecientes a los establecimientos que conforman la red asistencial de O’Higgins.
Con el objetivo de fortalecer las competencias del personal Auxiliar de los Servicios de Alimentación y Nutrición (SAN) de la red hospitalaria, mediante la actualización y el desarrollo de conocimientos y prácticas fundamentales en inocuidad alimentaria, con el fin de asegurar una adecuada manipulación de alimentos, resguardar la seguridad alimentaria de los usuarios y estandarizar procedimientos en los establecimientos de primer, segundo y tercer nivel de atención.
Luis Pérez, coordinador de Servicios de Alimentación y Nutrición del Servicio de Salud O’Higgins, manifestó que “la capacitación se llevó a cabo gracias a una excelente coordinación interhospitalaria, destacando que los docentes forman parte de la misma red, lo cual promueve el trabajo colaborativo y el aprovechamiento de las capacidades instaladas en los equipos locales. Los profesionales participantes, con sólidas habilidades docentes, fueron muy bien evaluados por los asistentes, especialmente por la calidad pedagógica, claridad expositiva y pertinencia de los contenidos”.
Pérez, enfatizó que “la metodología aplicada, basada en el “aprender haciendo” e integrada por actividades teórico-prácticas, favoreció ampliamente la comprensión, apropiación y aplicación de las temáticas abordadas, destacando especialmente la participación de Bárbara Rosas Varga, Encargada de la Unidad de Inocuidad de Alimentos del Departamento de Acción Sanitaria de la SEREMI, así como el valioso aporte de los nutricionistas del HFRZ, del Hospital de San Vicente y del equipo anfitrión del Hospital de San Fernando. Nada de esto habría sido posible sin la cohesión, compromiso y disposición de todos los equipos involucrados en este proceso formativo”.
La actividad abordó contenidos clave como inocuidad alimentaria, protocolos de buenas prácticas de manufactura, correcto lavado de manos, control de temperaturas, prevención de la contaminación cruzada, manejo de residuos, limpieza y desinfección de superficies, además de la normativa vigente relacionada con la manipulación segura de alimentos.
Bárbara Rosas, encargada de la Unidad de Inocuidad de Alimentos del Departamento de Acción Sanitaria de la SEREMI de Salud, expresó que “el rol del manipulador en este contexto va más allá, debido a que son el eslabón crucial entre la nutrición y la recuperación del paciente. En sus manos está garantizar que cada ración sea un factor de salud y no de riesgo. Mi principal desafío como expositora fue comunicar la gravedad de las consecuencias de una falla sin generar alarma, sino profunda conciencia, ya que abordamos temas que son sensibles y cruciales. La respuesta de los funcionarios fue notable y gratificante. Hubo una comprensión inmediata de que, el elaborar alimentos inocuos en este contexto no es solo un deber, sino una responsabilidad. Fue una experiencia que reafirmó el valor del factor humano como el principal guardián de la inocuidad”.
Una de las participantes, fue la funcionaria, Jessica Lara de la Unidad de Alimentación del Hospital de Peumo, quien se mostró muy satisfecha de participar en dicha instancia de capacitación “el curso “inocuidad”, abordó temas de suma importancia, muy relevantes para la central de alimentación, gracias al curso contaremos con nuevas herramientas para implementarlas dentro de nuestras unidades y llevar a cabo las buenas prácticas”.
Cabe destacar que esta capacitación permitió actualizar conocimientos para garantizar un servicio seguro y de calidad, fortaleciendo competencias y estandarizando procesos, para así prevenir enfermedades de transmisión alimentaria.
