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CUIDANDO EL CAPITAL VENOSO: HOSPITAL DR. FRANCO RAVERA AVANZA EN LA IMPLEMENTACIÓN DE LA TERCERA GUÍA DE BUENAS PRÁCTICAS RNAO

El objetivo que pone en marcha este manual, que orienta los cuidados en salud para profesionales clínicos, es preservar los vasos del sistema circulatorio de los pacientes que requieren terapia intravenosa.

Siendo uno de los 15 primeros centros hospitalarios del país, que suscrito al convenio de cooperación con la Registered Nurses Association of Ontario (RNAO) desde el 2021, para trabajar con sus orientaciones, reconocidas internacionalmente por encauzar procesos de enfermería, basándose en evidencia científica, el Hospital Dr. Franco Ravera Zunino (HFRZ), desarrolla la misión de asentar uno de sus 55 textos, enfocado en los accesos vasculares, métodos que permiten insertar por vía venosa catéteres para administrar tratamientos.

“Sabemos que el capital venoso, es decir, el conjunto de vasos del sistema circulatorio, de nuestros pacientes no es infinito. Que, si este último es sometido a una terapia extendida, debemos cuidar no puncionarlo muchas veces e instalar un dispositivo adecuado a la terapia a administrar  ya que podría lesionarse, agotarse, y por consecuencia, impedir que suministremos sus tratamientos endovenosos posteriores, o provocar algún evento adverso que pueda llegar a provocar un daño permanente en su capital vascular”, expresó la enfermera Paulina Vargas, coordinadora de RNAO en el HFRZ, agregando que, “ a razón de eso, iniciamos la aplicación de la tercera guía de RNAO en nuestro establecimiento, ya que sus orientaciones vienen a renovar nuestros protocolos, aportarnos a la gestión que hacemos de ese capital. La idea es preservarlo, cuidarlo”.

Con lo anterior, la coordinadora de RNAO en el Hospital Dr. Franco Ravera, enfatizó que “la implementación de esta guía, de la mano de un diagnóstico acucioso, que implicó llevar a cabo dos estudios, uno de carácter nacional, para conocer el abordaje de nuestros accesos vasculares centrales y otro local, para saber la pertinencia y la mantención a los accesos vasculares periféricos, nos permitió tener claridad respecto a cómo implantar las recomendaciones del programa. Es así que dispusimos la formación de nuestros primeros cuatro profesionales de enfermería del HFRZ, a través de un diplomado en la Universidad de Los Andes en esta materia, para transformarlos en referentes técnicos, que aporten a la incorporación de la guía y puedan orientarnos respecto a esta brecha institucional”.

En esa línea, Víctor Solís, enfermero coordinador de Unidad de Tratamientos Intensivos (UTI) y líder de las guías de accesos vasculares, añadió que “ hemos desarrollado distintas capacitaciones destinadas al: uso de ecografía para instalación de líneas arteriales, mantención del catéter central de inserción periférica o PICC, hemos  realizamos  2 jornadas sobre capital venoso y temas afines, que a la fecha nos han proporcionado funcionarios preparados para gestionar el capital vascular de nuestros usuarios , por otra parte se está ejecutando la formación y certificación de enfermeros como instaladores de PICC  en las áreas de Oncología, Unidad de Paciente Crítico (UPC)  adulto y Pediátrico , profesionales que oficiarán como un team de instaladores”.

Beneficios

Al respecto, la coordinadora RNAO, Paulina Vargas subrayó que “la implementación ha ido perfeccionando nuestro trabajo, entregándonos profesionales actualizados, facilitando que nuestros pacientes opten a un dispositivo apropiado a sus necesidades, más cómodo y seguro. El uso del PICC nos hace prescindir de instalar otros dispositivos que requieren uso de pabellón, horas medicas o depender de una programación mayor. Hemos beneficiado servicios de Oncología, Medicina, Cirugía Adultos, UPC y Hospitalización Domiciliaria entre otros”.

Elena Toro, enfermera instaladora del Servicio de Oncología del HFRZ, destacó que “este avance representa un cambio importante en la atención que ofrecemos a quienes están cursando su quimioterapia.  Nos ayuda a mejorar la seguridad y calidad de los procedimientos, optimizar el tiempo de instalación, sin necesidad de acudir a rayos x, por ejemplo”, finalizando que “con el dispositivo de la tecnología Sherlock garantizamos que reciban su tratamiento oportuno, sin demoras innecesarias, dándoles espacio de enfocarse en su bienestar y recuperación”.

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