Ganar menos de lo que corresponde es una de las principales razones de insatisfacción de los trabajadores con su actual trabajo. La pérdida de poder adquisitivo genera una mayor disposición a buscar mejor salario y hace sufrir a las empresas con la pérdida de talentos. Una situación que obliga a los líderes a buscar las mejores soluciones. Los salarios son un factor decisivo para el mercado laboral y la principal razón de los trabajadores para explicar por qué no están satisfechos con su trabajo actual. Y en un escenario económico inestable, donde la inflación se mantiene presente, el tema se convierte en un desafío para las empresas ante la amenaza de perder talento profesional a raíz de esa coyuntura.
Según datos obtenidos por Robert Half, un 68% de los trabajadores reconoce no estar satisfecho en su trabajo cuando el salario no es el adecuado para el cargo que ocupa. Y, por si eso fuera poco, el Instituto Nacional de Estadísticas reveló que el Índice Real de Remuneraciones disminuyó en 0,7% en relación al mismo mes del año pasado. Como consecuencia, los salarios reales completan 17 meses consecutivos de caídas en febrero.
El poder adquisitivo es un asunto sensible y genera un efecto sobre el mercado laboral. “Es ahí donde las empresas deben analizar la situación al interior de la organización y tomar medidas para evitar una eventual fuga de talentos”, dijo el director asociado de Robert Half Chile, Caio Arnaes.
El ejecutivo destacó que “ahí entra el juego el papel de los líderes, que están llamados a revisar las condiciones de cada profesional, conocer sus expectativas y realidades para luego analizar la factibilidad de negociar algún reajuste salarial”.
¿Y si no es posible un aumento salarial?
Cuando una empresa no tiene la capacidad de subir la apuesta con relación a lo que le está pagando a sus profesionales, existen vías alternativas.
Ofrecer beneficios acordes a las necesidades de los trabajadores puede ser una opción. “el desafío inicial es detectar de forma personalizada qué beneficio satisface a cada trabajador. Algunos preferirán, por ejemplo, la posibilidad de realizar alguna capacitación para acceder a un puesto de mayor relevancia, otros quizás deseen más tiempo libre o días de vacaciones. Ahora, también está la alternativa de ofrecer trabajo remoto, lo que permite una reducción de tiempo y costos de transporte, ayudas con el pago de cuentas de internet, cheques de restaurant, entre otras”, recordó Arnaes.
“Lo fundamental es que la comunicación fluya. Sin duda, el salario es un argumento fundamental para atraer y retener talento, especialmente si hablamos de un escenario donde la presión inflacionaria es una realidad. Sin embargo, conocer a las personas, escuchar sus necesidades y buscar soluciones, puede fortalecer las relaciones y los compromisos de ambas partes. El desafío radica en ese aspecto y los líderes tienen que aplicar sus mejores destrezas para asegurar a sus mejores talentos en un momento estratégicamente desafiante”, concluyó.