El recinto conmemora los 60 años desde que fue sede del Mundial de Fútbol de 1962 y recuerda que, junto con aportar al desarrollo del deporte de la Región de O’Higgins, en tiempos de Covid ha sido hospital de campaña, vacunatorio y centro de testeo para la toma de exámenes de antígenos.
La estadística sólo anota que el primer partido que se jugó en el estadio de la entonces Braden Copper Company, lo disputaron en 1947 los equipos de Contraloría y Bodegas, ambos del Departamento de Minas. No hay datos sobre cómo terminó ese encuentro, pero sí que desde ese momento la historia del recinto, actualmente propiedad de Codelco División El Teniente, estuvo al servicio de la comunidad y el desarrollo del deporte de la Región. Ya el 1 de junio de 1945 el lugar había sido inaugurado por los ejecutivos estadounidenses, aunque se demoraron dos años en autorizar su uso. Fue el escenario de la fusión del O’Higgins Braden y el América, que el 7 de abril de 1955 dieron vida al actual O’Higgins y sede de grandes acontecimientos futbolísticos como el Mundial de 1962, la Copa América de 2015, los Sudamericanos sub 17 de 2017, y el sub 20 de 2019, entre otros torneos internacionales.
A 60 años del mítico Mundial del 62
Tras el mayor terremoto de la historia, que en 1960 sacudió Valdivia y la zona sur del país, Rancagua asumió el desafío de ser sede del campeonato mundial de fútbol de 1962.
El estadio se remodeló para albergar siete encuentros del Grupo D, -que estaba integrado por Inglaterra, Argentina, Bulgaria y Hungría- además de un duelo de los cuartos de final del certamen entre Yugoslavia y Alemania Federal.
Adaptarse para hacer frente a la pandemia
Generaciones de rancagüinos desfilaron por la pista atlética cada 2 de octubre, recordando el aniversario de la batalla de Rancagua. Ese rito creó un lazo entre el recinto de calle Almarza y los vecinos y vecinas que se ha visto reforzado en los últimos dos años, cuando el estadio se transformó en el principal centro regional para hacer frente al Covid-19.
En abril de 2020 se transformó en hospital de campaña, con 70 y que permitió atender en las mejoras condiciones a pacientes de baja complejidad afectados por la pandemia.
En febrero de 2021, con el inicio del proceso de vacunación, El Teniente pasó a ser uno de los principales inoculatorios de la región y ya ha aplicado cerca de 150 mil dosis en sus instalaciones.
Y este año, en febrero, abrió sus puertas el centro de testeo de antígenos que diariamente recibe a la comunidad para entregar un servicio gratuito y de calidad.
El gerente general de la División El Teniente, Andrés Music, explica “para nosotros como Codelco siempre ha sido importante la región y lo más relevante en momento de pandemia ha sido aportar en temas de salud, por lo que no dudamos en ningún momento ante el llamado de las autoridades para poner a este edificio a disposición y convertirlo desde un centro deportivo a un hospital de campaña, un vacunatorio o un centro de testeo. Es otra forma de cumplir con nuestro propósito que es dar todo por Chile”.
